¿CONOCES LAS SEMEJANZAS ENTRA LA GASTRONOMÍA DE LA EDAD MEDIA Y LA ACTUAL?

Más allá de la diversidad de sus paisajes y productos típicos, Extremadura es una tierra llena de Historia.

Nuestro restaurante también tiene una historia familiar y una herencia gastronómica que seguimos conservando, por ello podrás aprovechar para degustar en nuestro restaurante ricos manjares de la zona que ya se consumían en la época medieval.

¿Cómo era la Alimentación en la Edad Media?

La dieta estaba marcada claramente por la clase social. Las clases más bajas se mantenían a base de pan y vino, añadiendo hortalizas y muy excepcionalmente carne, sobre todo despojos. Si no se tenía cerca río o mar, el pescado prácticamente no se consumía, porque no había cómo conservarlo (salvo en salazón) y llegaba a los mercados en muy mal estado.

Esta precaria dieta, nada tenía que ver con aquella de las clases altas, donde se daban banquetes cuanto más excesivos mejor, y sobre todo se apreciaba la carne de caza.

 

¿Qué tienen en común nuestra Gastronomía y la que se daba en la Edad Media?

En el Restaurante El Paraíso, nos gusta heredar la tradición. Somos amantes de los productos de calidad de la tierra. Como dato curioso, en la Edad Media, cada pueblo vendía sus productos entre sus propios residentes.

Los comerciantes no tenían permitido vender fuera, es decir, los alimentos eran para ser consumidos por los vecinos del propio lugar de origen. Tan solo una vez abastecidos, podían vender en otras tierras. En este aspecto tenemos ese punto en común con nuestros antepasados, ya que nos gusta tener nuestras propias materias primas para ofrecer lo mejor al cliente.

Respecto a los productos e ingredientes básicos, a continuación veremos como muchos de ellos son utilizados en nuestros platos más típicos y tradicionales.

En la Edad Media, algo que no podía faltar era el pan, así como el vino. Esto es algo que poco o nada ha cambiado. Pero veamos como se diferenciaba la alimentación en función de la clase social.

 

Cocina Señorial y Refinada

La realeza y la nobleza basaban la alimentación en la carne. Los platos destinados a las mesas reales suponían verdaderas obras de arte. Pues consistían en grandes platos de carnes de todo tipo.

Muy destacada también tanto la carne de caza de pluma (la de perdiz o faisán eran exclusivas de esta alta cocina señorial), como la de pelo (jabalí, ciervo, corzo, etc.). La liebre, por su parte, era uno de los guisos que solía servirse en estofado.

Otro plato que era posible degustar gracias a su conserva por la salazón, era el bacalao, el cuál siempre resultaba ser un gran manjar. De hecho, son muchas las recetas de la época que se pueden encontrar.

Cocina Campesina

El campesinado y en general las clases bajas basaban su alimentación en verduras, cereales y legumbres. En función del desarrollo económico que hubiesen alcanzado e incluso si poseían animales, tenían acceso a leche y huevos, entre otros.

El cerdo era un alimento fundamental en la dieta. Se hacían matanzas, que eran una base muy importante de la alimentación. Además, la manteca del mismo se utilizaba para cocinar. Debemos destacar el carnero y cordero, ambos también importantes. De hecho, un plato muy común era la caldereta de cordero.

 Por otro lado, el acceso a los productos y alimentos también era más o menos limitado en función del nivel social. Es decir, se podían subdividir lo siguiente:

Tierras Privadas

Éstas eran propiedad de los Señores, de la gente de la alta sociedad. Como tal, disponían y tenían todo tipo de cultivos de la tierra, dehesas, sierras (contaban con sus propios frutos, etc.).

Tierras Comunales

Eran aquellas a las cuales podían acceder los vecinos, es decir, se trataba de bienes comunes de los cuáles se podían beneficiar también los campesinos desde que así lo dictase la ordenanza.

A menos que se les tuviera otorgado el permiso, no podían coger bellotas por cuenta propia, ni para el consumo de la persona, ni como alimento para el cerdo.

 

Ingredientes, Alimentos y Platos Típicos

Cereales

Trigo y cebada fundamentalmente. El pan, como derivado, era la base de toda alimentación.

Hortalizas (Verduras y Legumbres)

Ajos, cebolla, habas, coles, lechugas, rábanos, espárragos trigueros, setas, tagarninas, garbanzos, etc.

Hierbas y Especias Aromáticas

Romero, tomillo, orégano, etc.

Tipos de Carnes

-  Carnes Fundamentales

Cerdo, carnero, cordero, pollo, capones, etc.

-  Carnes de Caza

De Pluma: Perdiz, faisán, palomas, zorzales, etc.

De Pelo: Jabalí, ciervo, corzo, gamo, conejo, liebre, etc.

Pescados

No era muy común en la dieta, dada la situación geográfica de la zona, pero sí que existía y se consumía el pescado de río (muy especialmente las tencas, aunque también los barbos, lampreas y pez boga, entre otros). Esto era más habitual en zonas de ríos, arroyos y corrientes de agua limpia.

Lácteos y Derivados

Leche de vaca, leche de cabra, quesos obtenidos de la leche de oveja, etc.

 Frutos y Frutas

Bellotas (se podía extraer el producto para hacer harina, o bien comerlas en crudo), almendras, aceitunas, madroños y uvas, entre otros.

Bebidas

Vino (otro elemento que no podía faltar).

Otros

Harina, huevos, miel (era muy utilizada) y sal.

 

 Algunos Platos Típicos de la Edad Media en nuestra Tierra

-  Migas

-  Gachas

-  Sopa de Ajo

-  Sopa Castellana

-  Rabo de Borrego

-  Caldereta de Cordero

-  Cochifrito

-  Cachuela

-  Estofado de Liebre

-  La Matanza (base importante de la alimentación)

-  Escabeches

 

Por supuesto, no pueden faltar los dulces y repostería entre los que destacan los pestiños y perrunillas, entre otros.

Muchos de estos platos, siguen bien presentes a día de hoy en nuestra cultura gastronómica. Por ello, nuestra filosofía es la de apostar por la materia prima propia, así como contar con productos Denominación de Origen (D.O.).